Los vehículos eléctricos reciben una reducción en el marchamo. Si optás por adquirir uno, debés saber que para los primeros 5 años, en el caso de un vehículo eléctrico nuevo, obtenés una reducción gradual en el marchamo.
Para aplicar este beneficio, debés inscribir el carro en el sistema Exonet del Ministerio de Hacienda para el primer año, luego el programa automáticamente aplicará el descuento en los siguientes años. Los vehículos híbridos no tienen esta ventaja.
Los vehículos eléctricos a menudo ahorran hasta un 50% respecto al costo del combustible fósil. Este gasto es uno de los que más cuidamos en nuestro presupuesto, pues suma montones a la compra de un auto. Aunque los vehículos híbridos mejoran el consumo, siempre implican un gasto significativo en combustible.
Con los vehículos eléctricos, podés despreocuparse de no circular un día a la semana, ya que a estos no se les aplica la restricción vehicular por placa. Por lo que podés andar por la libre con ellos, lo cual no sucede con uno híbrido.
Otra ventaja que podés disfrutar con los vehículos eléctricos es que están exonerados del pago de parquímetros en varias municipalidades. Los vehículos híbridos pagan todos los parquímetros.
En otras ocasiones te hemos hablado del impacto que tienen los mantenimientos vehiculares en tu presupuesto y lo importante que es considerar este gasto. Los vehículos eléctricos generan un ahorro en este rubro, pues la batería y los componentes electrónicos no requieren revisión o repuestos. Pocas partes se descomponen, ya que no hay cilindros, pistones, válvulas ni muflas y tampoco usa aceites, bujías ni otros insumos que se desgastan. Así que el mantenimiento se limita a algunas piezas como compensadores, luces y limpiaparabrisas. Por su parte, el vehículo híbrido requiere mantenimientos de manera frecuente.